El traje del novio: ¿Cómo elegirlo?

 

Aceptemos que las miradas y suspiros serán robados en su mayoría por el esplendor de la novia. Esto no quiere decir que el novio no luzca de igual modo radiante e impecable. Afortunadamente, el mercado ofrece un sinnúmero de posibilidades. Se tiene una amplia gama de opciones para que, a buen juicio del futuro esposo, éste elija un atuendo llevadero con su personalidad y se halle a la altura de la notoriedad de la novia. Siga estas sencillas recomendaciones para acertar en la elección de su vestimenta:

Si el matrimonio es de día:

Lo ideal es hacerlo vestido con un traje de corte sastre o chaqué. Recuerde que un traje a medida se acomodará a la perfección a las dimensiones de su cuerpo. En esto, las prendas convencionales de tienda, jamás podrán competir. El chaqué es utilizado por hombres conservadores y expresa su inclinación por lo clásico y tradicional. La disposición de la línea de botones del chaleco es generalmente recta, aunque puede elegir otra en la cual esta línea se encuentre ligeramente inclinada. Si opta por el Jacket, no olvide informar a sus familiares y amigos que lo hagan con el mismo estilo que usted.

Si el matrimonio es de noche:

El protocolo ordena que el caballero utilice una indumentaria con tonalidad oscura. El preferido es el frac. Debido a que la chaqueta lleva detrás dos colas que se ciñen al cuerpo, no es aconsejable que lo utilice alguien que no sea muy alto. Opcionalmente, se suele acompañar con sombrero, bastón y guantes (los colores varían según la tonalidad del pantalón y la chaqueta). Lo que sí no debe faltar es el pañuelo en el bolsillo de la levita, que es el distintivo de este tipo de trajes.

¿Esmoquin o no esmoquin?

El esmoquin es un atavío muy elegante que, según las convenciones de etiqueta, es para lucirlo en fiestas nocturnas, jamás para una boda.